El atún es uno de los alimentos que más consumimos diariamente pero.... ¿ Sabemos que estamos ingiriendo al consumir una lata de atún en conserva ?
El atún en conserva es uno de los pescados más consumidos en
España por detrás de la merluza. Este pescado es capturado mayoritariamente en
el Atlántico occidental y en el Mediterráneo.
Es rico en proteínas de alta calidad, posee bajo contenido en
grasas y contiene micronutrientes esenciales para nuestro organismo como el
Yodo, el Selenio y las Vitaminas D y A. También posee un alto contenido en
ácidos omega 3. Todo esto hace que este alimento pueda formar parte de nuestra
dieta saludable y equilibrada. Pero además
de todas estas ventajas el consumo de atún posee un gran inconveniente para
nuestro cuerpo: Su alto contenido en Mercurio.
El Mercurio es un elemento químico pesado. Su forma tóxica es
el metilmercurio que está presente en los pescados azules y no se elimina ni al
lavarlo ni al cocinarlo. Además este metal está presente en el aire (
procedente de erupciones volcánicas), posteriormente pasa al agua del mar dónde
los peces lo ingieren y más tarde pasan al organismo humano por la ingesta de
dichos peces, pasando a formar parte de la cadena alimentaria. Por tanto, una
ingesta excesiva de atún puede ser nociva para nuestra salud debido a su alto
contenido en Mercurio.
La OMS ( Organización mundial de la salud) recomienda un consumo responsable de este pescado controlando su ingesta especialmente en mujeres embarazadas, madres lactantes, mujeres en edad fértil y niños pequeños ya que el mercurio afecta al neurodesarrollo de los niños y fetos provocando retraso mental, convulsiones, pérdida de memoria, etc.
Los límites permitidos de este metal en el atún son de 1.3 microgramos por cada Kg de atún y en sangre humana los niveles de Mercurio no deben superar los 10 microgramos/litro. La EPA (Agencia de Protección Ambiental) no recomienda consumir más de 2 latas de atún en conserva a la semana.
¿Qué alternativa podemos usar si queremos seguir manteniendo
una dieta saludable?
Podremos tomar pescados azules de menores dimensiones que el
atún como el salmón, las sardinas y la caballa ya que contienen menos mercurio
debido a sus reducidas dimensiones y poseen todos los beneficios mencionados
anteriormente.
La verdad es que este artículo me ha sorprendido bastante, me considero bastante forofa del atún (aunque no lo suelo comer demasiado) e ignoraba por completo esta información. Del pescado azul que hay es el que más me gusta, así que eso para mi son malas noticias, compañero jajajaja.
ResponderEliminarDe todos modos el artículo está muy bien, y por lo menos ha beneficiado a alguien, pero estaría bien que se pudiese inventar alguna clase de proceso para poder eliminar el mercurio de este tipo de pescado, ¿hay tecnología para todo pero para esto no? Creo que los interesados en la venta de este tipo de pescado deberían interesarse o indagar en ello.
Un saludo, Misael.